lunes, 30 de diciembre de 2013

Aviones

La Madeja del Gato (aerodinámica)
Madeja #246
Por Christopher Vergara

El mundo de Cars aunque aborrecido por la crítica resultó ser un negocio altamente redituable para Disney. El merchadising derivado de la producción de Pixar ha reportado ingresos de miles de millones de dólares al estudio del ratón a consecuencia de que la combinación de carros + personajes carismáticos es simplemente irresistible, más para niños de entre 4 y 12 años de edad. 

Por otro lado, DisneyToon Studios, el otrora estudio productor de las malqueridas cheapquels (baratecuelas) de Disney, con la llegada de John Lasseter se transformó en una especie de estudio menor, dedicado a la producción de películas ligadas a determinadas franquicias, su primer trabajo bajo ésta formula es la conocida y popular franquicia de Tinker Bell, que alcanza ya las cinco películas y concluirá con siete entregas. 

Cuando DisneyToon empezó a desarrollar la que sería su siguiente franquicia, no fue realmente difícil decidir por donde irían los tejos, el universo de Cars (al cual está explicitamente lígida Aviones) tiene amplias posibilidades, es decir, el cielo es el límite. Por ello la decisión fue sencilla: ampliar la franquicia de Cars y que mejor que mediante los seres vivos no explorados de Cars, la de los aviones. 

Aviones narra la historia de Dusty Fumigaviones, un avión fumigador que toda su vida ha soñado con ser un avión de carreras, junto con Chug, una camioneta truck que es su mejor amigo y Dottie, mecánico habitual de los aviones y su mejor amiga. Sus sueños tomán forma cuando Skipper, un viejo avión de guerra acepta entrenarlo para volar. Con su guía, Dusty logra clasificar a la copa Alas a través del Mundo, una carrera de siete paradas que lo llevará por todo el mundo y donde conocerá a una vasta variedad de aviones de todo el mundo, incluyendo un avión mexicano, una brasileña, y una hindú, que termina siendo su novia. 

Como la reseña revela, están practicamente todos los elementos de Cars, quizá con pequeños giros, un protagonista envalentonado pero inexperto, un viejo sabio que enseña, un mejor amigo tonto y bobo, una novia inteligente y aventurera y una carrera alrededor del mundo. La ejecución es también bastante similar, sin embargo ésto no es malo en si. 

Como alguien que disfrutó enormemente Cars y su secuela, me la pasé bastante bien viendo Aviones, sin ser la gran película, es bastante divertida, entretenida y graciosa. Una clásica reza que importan los qué pero también los cómo, y Aviones es muestra de ello, sí, Aviones cuenta lo mismo que Cars, pero lo hace con elementos propios que entregan un producto propio disfrutable y bonito, y para el estándar de DisneyToon Studios, eso es más que un cumplido. Al igual que la saga Tinker Bell, Aviones son películas divertidas y graciosas que los niños van a adorar y un adulto puede disfrutar cuándo se las encuentre en cable. No todos los filmes animados están destinados a convertirse en grandes parangónes de la industria. 

Como mexicano la verdad encontré bastante simpático a El Chupacabras, y aunque es algo bastante rustico que su visualización de la Ciudad de México sean puras piramides, no encontré molestos ni dañinos los estereotipos mostrados. Chupacabras (brillantemente doblado por un irreconocible Ariel Miramontes, alias Albertano de María de todos los Ángeles) es divertido, gracioso, galancete, solidario y buen amigo. Como estereotipo del mexicano la verdad quedo conforme.

La animación, maquilada en India, no alcanza los niveles de esplendor de la netamente hecha en Estados Unidos, como Pixar o Disney Animation, pero al menos es bastante linda. El diseño de personajes y ambientes es congruente con el de Cars y los efectos se hallan bien logrados, dándole uniformidad al título. 

El guión, como dije es totalmente predecible, pero como lo indique, está bien ejecutado. Quizá lo más reprobable (y ojalá sea algo que corrijan con las dos secuelas planeadas) es la falta de imaginación para crear ambientes interesantes en el Universo Cars. Los tres filmes del mismo han sido carreras, como si lo único digno de contarse en ese universo fuera eso, algo más deben encontrar. Fire & Rescue, secuela de Aviones, apunta a una historia diferente, ojalá así sea. 

El doblaje, dirigido por José Antonio Macías está bien hecho. Edson Matus ha mejorado increíblemente como actor y su Dusty es divertido, don Rubén Moya es brillante como siempre y su Chug es hermoso, Oscar Bonfiglio como el villano Ripslinger muy simpático, con suficiente dosis de maldad. Es decir, en general es un buen elenco y un buen doblaje. 

Aviones no es más de lo que pretende ser y eso no es malo. Es una comedia animada para niños, con mensaje inspiracional de por medio, una ejecución clara y divertida y una manufactura adecuada. Quizá lo único que extrañé fue un cameo de algún personaje de Cars. Eso hubiera sido un lindo toque.

El Último Hilo: Ésta columna y su autor desea a sus amables lectores, que hayan pasado una feliz Navidad y que pasen un excelente arranque de 2014, asímismo, que éste año esté repleto de amor, energía y mucha paz, buscando siempre el bienestar. Nos seguimos leyendo el próximo año.

Y en la próxima madeja: Review de María de todos los Ángeles.

sábado, 21 de diciembre de 2013

Frozen: Una Aventura Congelada

La Madeja del Gato (animada)
Madeja #245
Por Christopher Vergara

Una de las máximas en todo cuento de hadas es que la magia más poderosa que existe (aunque sea la más difícil de encontrar y comprender) es el amor verdadero. Más aun, el amor verdadero es tan poderoso que es el único capaz de romper cualquier hechizo, por poderoso que éste sea. Sin embargo, pocas veces se nos recuerda que el amor verdadero se manifiesta de muchas y diversas formas. 

Frozen: Una Aventura Congelada, nos cuenta la historia de Anna y Elsa, dos princesas en el reino nórdico de Arendelle, Elsa posee poderes mágicos de nacimiento que le dan control sobre el hielo con los cuales juega con su hermana menor Anna, sin embargo, cuando un accidente pone en peligro la vida de Anna, sus padres deciden separarlas, aislando a Elsa del mundo y haciendo ambas crezcan separadas. 

Tres años después de la muerte de sus padres, cuando Elsa es coronada reina de Arendelle, Anna presiona demasiado a su hermana provocando que ésta explote y revele sus poderes ante todos, tras lo cual decide huir a las montañas desde donde construye un palacio de hielo, sin darse cuenta que ha atrapado a Arendelle en un invierno eterno. Anna, con la ayuda de Kristoff, un vendedor de hielo, Sven, el fiel reno ayudante de Kristoff y Olaf, un muñeco de nieve viviente creación de Elsa, deberá encontrar a su hermana y regresar el ansiado verano al reino de invierno eterno. 

Frozen está muy ligeramente basada en el cuento de hadas La Reina de las Nieves de Hans Christian Andersen, sin embargo, los directores del filme Jennifer Lee (guionista de Wreck-It Ralph y también de Frozen) y Chris Buck (director de Tarzán y Reyes de las Olas) logran construir un hermoso relato sobre el amor fraternal de dos hermanas, en el reafirman el legado cultural y la esencia de Disney a la vez que ofrecen nuevas e interesantes posturas sobre las bases fundacionales del estudio. 

Esto, que parecería una contradicción no lo es. Tras una década verdaderamente complicada, Disney Animation Studios ha ido recuperando poco a poco el prestigio merecidamente ganado desde 1937, cada filme desde La Familia del Futuro de 2007 a superado al anterior y Frozen consolida ésta estela de crecimiento y espectacularidad. Frozen contiene todos los elementos que son insigne en Disney: un cuento de hadas donde el amor verdadero triunfa, canciones fabulosas, unos protagonistas empáticos y simpáticos y unos sidekicks encantadores y divertidos. Los ingredientes de la receta ahí están. 

Pero los ingredientes de la receta no bastan cuando no hay corazón (ahí tenemos desde la insípida Pocahontas hasta la petulante Merida de Valiente), y eso es lo que Jennifer Lee le supo aportar con soberbia maestría. Disney ha intentado durante los últimos años evolucionar el concepto de Princesa ante las críticas que se han formulado a la luz del feminismo y la equidad de género. Tiana habló sobre el trabajo duro como método para conseguir los sueños, Rapunzel mostró que las mujeres también saben golpear además de valerse por si mismas. En Frozen, Elsa nos muestra que las mujeres también saben ejercer el poder y Anna que no hay nada que se interponga entre una chica que busca lograr sus objetivos. 

Habrá voces que digan lo contrario y piensen que la película sólo repite las formulas del pasado mostrando Princesas igual de débiles y necesitadas. Habrá quienes al contrario digan que hasta la misma Bella Durmiente mostraba tales características en su filme. Pero lo cierto es que Frozen consolida el mensaje que Disney busca mostrar sobre lo que es ser una Princesa en el siglo XXI. No sólo en el sentido de mostrar mujeres empoderadas e independientes, sino reafirmar que las debilidades de una persona pueden ser su propia fortaleza cuándo las conocen y deciden enfrentarlas o aprovecharlas. 

Ser Princesa entonces significa abrazar los valores esenciales del feminismo actual sin renunciar a cuestiones más 'banales' como el enamoramiento o el aprecio por la belleza personal. (cuestión dónde muchas feministas casi se quieren aventar al carril del Metro).

Otra lectura sin duda muy rica tiene que ver con la metáfora sobre los errores que cometen los padres, muchas veces sin notarlo. Buscando proteger a sus hijas, los Reyes deciden separarlas, cerrar las puertas del Castillo, y aislar durante años a Elsa en su habitación (algo que si me lo permiten clasifica como maltrato infantil). Peor aun, condicionan a Elsa, y en lugar de ayudarla a explotar sus poderes, la obligan a esconder su talento por miedo a lo que fueran a pensar los demás. Cambién los adjetivos y dejen los verbos y tendrán lo que muchos padres hacen con sus hijos cuándo éstos no son lo que ellos hubieran deseado. Desde una niña a la que no le permiten realizar deportes hasta un niño al que le impiden practicar ballet. Lee acierta al reflejar uno de los errores más cotidianos que tienen los padres, consecuencia de su propia ignorancia y temor.

Elsa creció toda su vida atosigada y atormentada por sus padres que cometieron el grave error de no comprender a su hija, sino sólo buscar limitar quien es. Por ello es que Let It Go / Libre Soy, el musical donde Elsa decide renunciar a esconder quien es y abrazar su esencia tiene un potencial catártico impresionante. Una descripción de la canción que me fascino dice que Let It Go es "mitad Defying Gravity de Wicked y mitad 'estoy tan loca como una cabra y me importa un carajo' lo cual técnicamente sigue siendo Defying Gravity". Y esa descripción es completamente cierta, parte de aceptar quien eres es defraudar a tus padres al deshacer algunas de sus aspiraciones y sueños. El mensaje de Let It Go es inmensamente poderoso, es un himno de liberación y de aceptación, de aceptar que 'el frío es parte también de mi'. El uso de las metáforas es celestial. 

Pero la aventura de Anna tampoco es menospreciable. Anna también sufrió el trauma de crecer pensando que su hermana no la quería, pese a que, con los pocos recuerdos que ella tenía, recordaba lo mucho que disfrutaban juntas y se amaban. Descubrir los poderes de Anna en lugar de asustarla, reafirma el inmenso amor que siente por Elsa y la lleva a emprender un viaje épico donde además conoce lo que es el verdadero amor romántico, que no se diferencia en esencia del fraternal ni de cualquier tipo de amor que básicamente es 'poner de lado tus intereses por el bienestar de otra persona'. 

Que es así como se llega al acto final. Elsa aprende la vieja lección de que el pode corrompe y destruye, y como en su caso en muchas ocasiones se sale de control. Pero es ahí donde la virtud de cuento de hadas aparece y como tal se convierte en un aliciente de esperanza y redención. Es el amor el que salva todo. Es el amor el que ayuda a Elsa a realmente entender sus poderes ya que aprende aquello que sus padres no supieron transmitirle por una mezcla de amor con temor. El amor es aquello que modula las almas y convierte el frío más congelante en un cálido abrazo, es aquello que le permite tomar control de sus poderes, descongelar a Arendelle y tomar su lugar, gobernando con sabiduría, templanza y claro, amor. 

Y esa lección se la sin duda Anna, que gracias a Olaf, a Kristoff, a Anna y hasta el mismo Hans, comprende lo que es el amor, y comprende que más que placer y gozo es sacrificio, y justo cuándo ella decide hacer el sacrificio final por su hermana, es que la salvación le es brindada. El amor verdadero entonces, vienen en muchas formas distintas, de hermanos, de amigos, de tu pareja o de un muñeco de nieve. Por eso el amor es tan poderoso y fuerte, porqué es muy flexible, aparece donde y como menos lo esperas.

Por esto es que el guión de Frozen es verdaderamente brillante, y por ello es que es el mejor filme Disney desde El Rey León, eleva la calidad del guión a un nivel altísimo al dotarle de lecturas y contenidos a las viejas enseñanzas de toda la vida. Aquí el amor ya no sólo se explica en base a frases y acciones, el amor es dotado de un discurso filosófico sólido, sólo equiparable al de El Rey León o La Bella y la Bestia. Es ahí donde la esencia Disney encuentra un sentido y motivo en el mundo actual, en el discurso actual.

El elenco de apoyo cumple sus funciones de manera impecable. Olaf sin duda es el sidekick clásico Disney, encantador y divertido, con grandiosos chistes y un origen sumamente bello, pues remonta sus orígenes a la infancia de Elsa y Anna. Kristoff es el amor romántico de Anna, cumpliendo su función de reafirmar la enseñanza básica sobre que es el amor aunque de una manera más tradicional. Quizá lo destacable sin duda es que si ésta película hubiera sido hace veinte años, hubiera sido Anna y Kristoff quienes salvaran Arendelle, y no solamente Anna. Hans sin duda constituye el villano de la historia, uno que es tratado de encubrir para que sea un giro de tuerca aunque la verdad sea dicho no se sostiene. Sin embargo cumple la función de revelar a Anna que NO es el amor y con ello completar la lección.

La música... no hay manera de no amar esta música. A cargo de Robert Lopez y Kristen Anderson Lopez, el primero fue autor de las fantásticas y poco familiares musicales de Broadway, Avenida Q y The Book of Mormon, la segunda es su esposa y juntos habían hecho la música del infravalorado Winnie The Pooh de 2011. A diferencia de la música de Enredados o La Princesa y el Sapo que funcionan como piezas individualess pop, la música de Frozen está claramente integrada en la trama, sin ella no se explica y sólo con el filme funciona perfectamente, tal como un musical de Broadway, que esperemos Disney esté planeando. 

Entre todas las canciones sin duda destaca la magnífica Let It Go / Libre Soy, la letra es simplemente estrujante, la orquestación es brutalmente fantástica y la voz de Idina Menzel, una de las mejores voces en la historia del teatro musical es perfecta. Do You Want To Build a Snowman? / ¿Y si hacemos un muñeco? es completamente desgarradora, una balada que con su montaje hace imposible no llorar. For The First Time In Forever / Finalmente y como nunca es la canción I Wish de Anna, fresca y radiante como el personaje.

Love is An Open Door / La Puerta es el Amor y Fixer Upper / Reparaciones son la antítesis aunque no lo parecen, y son brillantes canciones. Ambas hablan sobre el amor, pero la primera se refiere al enamoramiento sin comprensión, propio de un adolescente, un amor sin compromisos e infantil, mientras que la segunda habla sobre la aceptación que viene con el amor verdadero, sobre el aceptar al otro como es, sin buscar realmente cambiarlo. 

El aspecto técnico realmente sorprende. Disney es sin duda el líder en animación, sea en Pixar o en Disney Animation. Sin embargo el CGI de Disney Animation seguía sin lucir realmente sorprendente hasta éste filme. Es simplemente deslumbrante la calidad de animación de éste filme, las atmósferas, los climas, los copos de nieve, las texturas, el diseño de personajes, los climas, las ráfagas, la hermosa demostración de poderes de Elsa, todo es francamente alucinante. En el aspecto técnico Disney establece un estándar realmente único.  Let It Go no sería el momento cumbre que es, sin esa animación francamente alucinante. El 3D es realmente hermoso, al provocar la sensación de profundidad incomparable en esos grandes escenarios.

El doblaje realmente cumple. La verdad yo tenía mis dudas pues Carmen Sarahí (actriz de teatro musical en México) está muy lejos de Idina Menzel, pero más allá de que Idina Menzel es mucho para cualquiera y el personaje está hecho a su medida, Carmen Sarahí cumple muy bien, realmente crea una Elsa creíble, sería, confundida y liberada como debe ser. Romina Marroquín Payró finalmente es la Princesa que debía ser desde Enredados, y entrega una Anna impecable su voz es divertida y cándida, su canto es pulido y amable. 

José Gilberto Vilchis (otro que debía ser Príncipe desde Enredados) también entrega un doblaje carismático y amable, realmente su voz logra transmitir el desgarbo y carácter rustico de Kristoff a la vez que es lindo y tierno. Hugo Serrano cumple también como Hans, provocando ternura instantánea que se revela como falsa. Quizá la parte más débil sea David Filio que aunque cumple como Olaf, sin duda se siente corto en algunas partes. 

La adaptación de las letras al español, obra de Gaby Cárdenas, David Filio y Raúl Aldana es correcta en la mayoría de los casos. Donde presenta más problemas es en Finalmente y como nunca que tienen partes díficiles de entender pero en general funciona bien. La dirección a cargo de José Antonio Macías bastante bien. 

No exageran quienes llaman a Frozen el mejor filme animado del año, casi quince años después de que la vorágine cultural de Pixar y DreamWorks casi derrotan a Disney, ésta ha logrado levantarse de las cenizas y demostrar que su esencia es tan profundamente poderosa que nunca podrá ser eliminada, pues no hay cosa más resonante que una historia de amor perfectamente bien contada. Bravo Frozen, bravo Disney. 

El Último Hilo: Antes de Frozen se proyecta el corto ¡Es Hora de Viajar!, el cuál es estelarizado por Mickey Mouse. El corto inicia como un corto clásico de Mickey en blanco y negro para después convertirse en un irreverente y gracioso corto con todo el sabor clásico de Disney y una utilización soberbia de la tecnología en 3D. De alguna manera anticipa en pocos minutos, lo mismo que Frozen ampliará después. Además claro, el doblaje con don Francisco Colmenero como Pedro el malo y Dianita Santos como Minnie, fabuloso. 

Los temas de cierre de Frozen nada mal. Demi Lovato no es Idina Menzel, y Martina Stoessel no es Lovato. Pero sus versiones de cierre bastante bonitas sin duda. Los créditos, diseño de la fantástica Lisa Keene, muy destacables sin duda. 

Y en la próxima madeja: Review de Aviones.

domingo, 15 de diciembre de 2013

Nuevos partidos políticos

La Madeja del Gato (electoral)
Madeja #244
Por Christopher Vergara

El proceso de formación de nuevos partidos establecido en la legislación electoral y que arrancó a principios de enero de éste año, sigue su curso en el cual, gracias a los oportunos informes de la autoridad electoral, tenemos ya un panorama claro de quienes son los potenciales partidos políticos que podrían aparecer en la boleta electora, y como en aquella mítica y sádica canción de los perritos, cada vez quedan menos.

De las 52 organizaciones que le manifestaron originalmente al Instituto su intención de convertirse en partidos políticos, sólo 32 continúan en el procedimiento de selección. Diez de ellas fueron excluidas por el IFE al no cumplir con los requisitos y diez de ellas anunciaron el desistimiento de su pretensión al Instituto. Una de las bajas más notables es la de la asociación Concertación Mexicana, ese pastiche de figuras políticas que tenía entre sus principales promotores a Manuel Espino, René Arce y Jorge Carlos Diaz Cuervo. 

Siendo honestos tampoco es la gran perdida, más allá de que sus cuadros políticos eran puro cascajo político, en el cual tenía metidas sus narices hasta Rosario Robles, era un partido que salvo por la fuerza territorial cada vez más menguante de René Arce, no se veía por donde pudieran juntar los requisitos para lograr el registro. Quizá lo más interesante será ver si Arce retoma su idea de un partido local de izquierda 'moderna' en la capital de la República. 

Con ello aun nos quedan treinta y dos asociaciones que están buscando su registro como partidos políticos, pero no hay que alarmarse, pues lo más probable es que sólo dos de ellas obtengan el registro (tres si ocurre un milagro único de aquí a enero cuándo vence el plazo para la realización de las asambleas). 

Vale la pena recordar que para obtener el registro, las asociaciones deben organizar cuándo menos 20 asambleas estatales con 3,000 simpatizantes o 200 asambleas distritales con 300 simpatizantes en cada una además de contar cuándo menos con un número de militantes de 0.26% del número de ciudadanos inscrito en el padrón electoral, que en términos llanos serán 219,608 mil ciudadanos.

De las 32 asociaciones que siguen en le proceso sólo 11 han presentado al Instituto su calendario de asambleas al corte de octubre, es decir, cuándo tienen apenas 2 meses para realizarlas. De éstas once asociaciones ocho eligieron el mecanismo de asambleas estatales y tres el de distritales. Siguen quedando menos perritos. 

Sin embargo en términos llanos, de las ocho organizaciones que realizarán asambleas estatales sólo tres asociaciones han realizado asambleas, siendo obviamente Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) la más avanzada con 20 (aunque para estas alturas ya son 24), seguida de Erigiendo una Nueva República, impulsada por antiguos panistas, con dos asambleas, y la Organización Política del Pueblo y los Trabajadores, organización de izquierdistas radicales, con una. 

Por el lado de las asambleas distritales, a la cabeza van Encuentro Social, que actualmente es partido local en Baja California con 104 asambleas celebradas, de 256 planeadas y el Frente Humanista con 69 de 239 calendarizadas.

Mientras tanto, respecto de los afiliados, a la cabeza va Morena con 96,015 afiliados, seguida de Encuentro Social con 38,711, el Frente Humanista con 25,247 y las otras dos con 6,300 y 3,200. Como se puede ver aún están MUY lejos de lograr el número de militantes requeridos, aun en el caso de Morena, apenas contabiliza siendo optimistas el 50% de su número de militantes requerido, ambas asociaciones aun tienen un largo camino que recorrer. 

El objetivo de las asambleas es probar que los partidos tienen fuerza y organización territorial en todo el país, es decir, que no son únicamente agrupaciones locales (así lo establece la ley, aunque no sea necesariamente correcto), por otro lado, el número de afiliados muestra que tienen un apoyo social suficiente. Aunque ésta idea tampoco me parece la más afortunada, pues 220 mil personas es un número elevado para conformar una agrupación y dirigirla.

En resumen, de mantenerse la tendencia y cumplir los requisitos Morena y Encuentro Social serán los dos nuevos partidos políticos que competirán en la boleta en 2015. Eso de 'nuevos' parece un chiste, pues ambos tienen antecedentes electorales amplia (o medianamente) conocidos. De Morena se han escrito ríos de tinta, de Encuentro Social sin embargo se ha dicho poco.

Respecto de Encuentro Social, podemos decir que pese a existir como partido político local en Baja California, no es una fuerza política relevante en aquel estado. Con registro desde 2006, ha competido en tres procesos electorales (2007, 2010 y 2013), en todos ellos estando aliado con algún partido político. Derivado de su naturaleza derechista (el partido está integrado mayoritariamente por grupos protestantes) en los primeros dos procesos electorales se alió con Acción Nacional, aunque en las elecciones de éste año apoyaron al Revolucionario Institucional y su candidato Castro Trenti. Ergo, jamás han competido solos y demostrado su valía como partido político local. 

Ambos partidos enfrentarán un proceso electoral bastante complicado en 2015, donde de aprobarse la funesta reforma política, deberán juntar no el 2% de los votos, sino el 3% para poder mantener el registro, además claro sin la posibilidad de competir coaligados pues la legislación electoral lo prohibe. Esto teniendo como marco las elecciones intermedias donde la población reduce considerablemente su participación (llegando a niveles de 40%) y donde son las estructuras de los partidos, más que los ciudadanos las que muestran su poder.

Como creencia popular, Morena no debería tener problemas en conservar el registro, incluso yendo más allá. Hay quienes incluso sueñan con que Morena desaparezca al Movimiento Ciudadano y/o al Partido del Trabajo y debilite fuertemente al Partido de la Revolución Democrática, lo cual se antoja ciertamente dificil. Sin embargo, los últimos días, con Andrés Manuel López Obrador enfermo y ausente, Morena se mostró bastante débil en sus movilizaciones y cercos contra la reforma energética, poniendo en duda que tanto será el caudal de votos con un López Obrador que pide el voto sin aparecer en la boleta, y sin el apoyo de una marca conocida como PRD, PT o MC.

También toca hablar de otro de los grandes defectos de la reforma política recientemente aprobada, que es subir el umbral de votación requerida de dos a tres por ciento de los votos emitidos, lo cual sin duda vuelve más difícil para un partido conservar el registro. Este agregado es parte de las banderas derechistas de Acción Nacional que consideran que a menos partidos, el sistema político es más funcional, sumado a otras imbéciles ideas como reducir los diputados plurinominales o que la democracia es muy cara por tantas elecciones.

A diferencia de determinados politólogos poco iluminados que sostienen que un sistema político sólo requiere dos partidos, la realidad es que un sistema político necesita tantos partidos como sea necesario, en tanto la sociedad logre estar debidamente representada y cuente con partidos políticos que representen sus aspiraciones y anhelos sociales, que sean adecuadas correas de trasmisión de sus intereses. 

Parte de los actual crisis de legitimidad del régimen deriva de una falta de confianza de los ciudadanos hacia los partidos políticos. Lamentablemente, en lugar de contar con una sociedad activa que se apodere de los actuales partidos políticos o forme los propios, sólo buscan su desaparición, en parte fomentada por los medios y su constante mensaje anti-política. 

Es decir, la sociedad no se ha dado cuenta que los partidos políticos más que un problema del sistema político son la respuesta a los problemas del mismo, al ser los aglutinadores de intereses y los mejores aparatos para conseguir el poder, en lugar de chaquetas fantasiosas como las candidaturas independientes. 

No digo que sea sencillo o fácil, pero la mal llamada partidocracia sólo se va a romper cuándo realmente se le pierda el asco a participar activamente en la política partidista y no sólo tomar la cómoda careta de la sociedad civil. Sólo ingresando en los partidos políticos y luchando desde adentro es que se va a lograr que ellos realmente legislen no en su beneficio, sino en el de todos. Pero eso no parece que sucederá en el corto plazo. 

Morena y Encuentro Social dificilmente solucionarán la crisis de legítimidad del sistema político mexicano y mucho menos lo harán éstas insensatas y restrictivas reglas para la formación de partidos políticos, pero como en muchos casos, la respuesta está en que la sociedad se involucre activamente e intente corregir las deficiencias del sistema político, en lugar de sólo criticar cómodamente a 'la partidocracia que sólo vela por sus intereses sin trabajar por nosotros los (pobres) ciudadanos que pagamos sus salarios'. 

Y en la próxima: Review de Frozen, una Aventura Congelada.

sábado, 7 de diciembre de 2013

La (apresurada) reforma política

La Madeja del Gato (política y electoral)
Madeja #243
Por Christopher Vergara

Más allá de las reflexiones realizadas sobre la idea y diseño del Instituto Nacional Electoral que realicé en la columna pasada, la presente reflexión tiene por objeto llamar la atención sobre el inminente riesgo en que el Congreso de la Unión está sometiendo a la democracia mexicana por culpa del revanchismo político de Acción Nacional y la extrema urgencia del Revolucionario Institucional por obtener la reforma energética. 

Como saben, la reforma política por presión del PAN fue atada como moneda de cambio a la energética, que es la de mayor interés para la Presidencia de Enrique Peña Nieto y el PRI. Acción Nacional podrá envolverse en todas las banderas democráticas y en todos los discursos que quiera, pero lo único que ha logrado con su berrinche pos-electoral es sacar una reforma que además de muchas interrogaciones y deficiencias, es totalmente apresurada y no reflexionada. No es culpa sólo de ellos, culpen también a Peña Nieto que en su necedad de tener la reforma antes de que termine el 2013, está cediendo en todo lo cedible, para tener una nota que valide lo que ha sido un mediocre año de gobierno.

Más allá del contenido de las reformas (el cual no me parece negativo, pese al centralismo excesivo del INE, la autonomía constitucional de la PGR es una vieja demanda de los juristas, y la del Coneval es un mero capricho innecesario pero que tampoco estorba), es con la forma en que se realizan y peor aun, con la implementación que se les está dando donde tengo brutales desacuerdos. 

La implementación de la reforma electoral NO va a estar lista para el proceso electoral de 2014 - 2015. Los legisladores están pecando de excesiva ingenuidad o de total y completa mala fe. La reforma establece que a más tardar el 30 de abril de 2014 el Congreso expedirá la nueva legislación electoral (que incluye una nueva e innecesaria ley de partidos, y una nueva ley de procedimientos electorales, es decir un Cofipe). ¿Enserio?, ¿enserio las leyes van a estar listas para esa fecha?. 

Si en algo se ha caracterizado el Congreso mexicano es que NUNCA ha cumplido los plazos legales que el mismo se ha impuesto. No hay que ir más lejos para revisar que ha habido decenas de legislaciones secundarias que han salido mucho después de la fecha 'mortal' que el Congreso tenía. Sin ir más lejos, la legislación en materia de telecomunicaciones YA debería existir y es hora de que al menos a febrero se nos va. O ahí tenemos el inmundo caso de la Ley de Amparo que se tardó casi dos años después de la fecha en que constitucionalmente se debió haber publicado. 

Más allá de lo que señala el transitorio de la reforma, constitucionalmente las normas deben ser promulgadas a más tardar noventa días antes de que arranque el proceso electoral federal de 2014 - 2015, que inicia la primera semana de octubre. Es decir, la legislación electoral tiene como fecha fatal los últimos días de junio. 

Esto nos lleva a dos escenarios igualmente escabrosos:
a) El Congreso de la Unión cumple y emite la legislación electoral en tiempo, sea en abril, junio o cualquier fecha intermedia. Legalmente todo va a ser impecable, pero, ¿realmente es lo más deseable?, ¿nos garantiza una legislación clara, específica y extensa como es la electoral?, ¿legislar a marchas forzadas no va a provocar leyes defectuosas?, y mejor aún, ¿la autoridad electoral, igualmente novata, va a saber como implementar estas leyes?. 
b) Las leyes no son emitidas a tiempo y se crea una paradoja jurídica. Pues por un lado el proceso se va a regir por las normas constitucionales nuevas y por otro por la legislación electoral anterior a la reforma. ¿Cómo va a actuar el flamante INE con una legislación que ni siquiera fue diseñada para tales atribuciones reforzadas?. 

Ambos escenarios sólo configuran un desastre. Más aun, lo predigo desde este momento: las elecciones de 2015 van a ser un completo desastre para la autoridad electoral. 

Pero vamos más allá, ¿realmente va a estar el Consejo General del INE debidamente integrado?. De las cuatro renovaciones del Consejo General del IFE que se han hecho con posterioridad a la reforma de 2007, sólo UNA de ellas, lo hizo en tiempo y forma. Las otras tres, incluyendo la actual en curso, han dejado incompleto y en condiciones dificiles por largo tiempo, al Instituto. 

Aun si el Consejo es integrado de inmediato tras la promulgación de la reforma constitucional, que siendo optimistas será en febrero de 2014, eso sólo les da unos escasos ocho meses al flamante Consejo de no sólo sentarse cómodamente en sus sillas, sino a la vez que iniciar los preparativos para el proceso electoral de 2015, tomarse la molestia de asumir el manto de funciones que el INE representa y que son todo una extensión de las actuales. 

Pero, siendo más macabros aun, ¿y si no hay legislación?. Supongamos que ya tenemos nuestro Consejo del INE perfectamente integrado, pero resulta que la legislación electoral simplemente no existe aún. O mejor aun, suceden los casos anteriormente descritos. El Consejo se va a ver, desde su completa inexperiencia administrativa, a legislar en los vacíos que se le presenten, lo cual no dará ninguna certeza a la actuación del Instituto, y terminará en muchos casos al arbitrio del no siempre fino juicio del Tribunal Electoral. 

También hay que tomar en cuenta que por mucha experiencia académica, litigiosa o incluso administrativa que tengan los nuevos Consejeros no van a saber como administrar un Instituto, y mucho menos uno que está estrenando funciones, con modelos electorales que nunca se han utilizado en México, y con una legislación electoral ambigua, que da amplio margen a su actuación. 

En resumen, la reforma electoral NO va a estar lista para las elecciones de 2015. La reforma electoral DEBE aplazarse para las elecciones de 2018. De lo contrario nos estamos dirigiendo hacia un DESASTRE.

Así como estamos dejando la autonomía de la PGR y la reelección para tiempos mejores, es decir 2018. La transformación del IFE en INE (qué es todo un procedimiento, y no un simple cambio de nombre), debe postegarse para 2018. De lo contrario la certeza en los resultados de la elección estarán en riesgo, y la credibilidad que tanto le ha costado conseguir al IFE se irá al caño. 

Si los diputados y senadores fueran inteligentes y no se ataran a las niñerias del PAN y sus ánimos de revancha, posteriores a su merecida derrota electoral, la reforma no sería implementada hasta 2018. Es decir, los procesos electorales de 2015, tanto federales como locales se llevarían de acuerdo a las reglas establecidas con anterioridad, y una vez concluido el proceso de 2015, se iniciaría la implementación de la nueva normativa electoral y el establecimiento de este nuevo modelo electoral centralista. 

A nivel de Consejo General se debería permitir a los actuales Consejeros concluir su encargo (y no someterlos a la vergüenza de volver a probar su experiencia, cuestión innecesaria), y elegir siete Consejeros, dado que Marco Antonio Baños y Benito Nacif concluyen su periodo en 2016, se elegiría uno más para esa fecha. Dado que Lorenzo Córdova y María Marván lo hacen en 2019, se elegirían dos Consejeros más y los restantes tres, así como el Consejero Presidente serían electos para concluir en 2022. Así, se garantiza un régimen de transición donde se respeta la experiencia de los actuales Consejeros así como a los siete restantes serían parteros del nuevo INE. 

Con ello se tendría la completa calma del  mundo para entender la dinámica que tendrán los organismos electorales locales y el INE. Se podrán revisar los nombramientos de los Consejos Electorales Locales sin presiones y sin prisas. Insisto, una reforma de tal calado no se puede implementar en apenas unos meses.

En pocas líneas, el IFE existiría hasta 2015, y a partir de ahí se tendrían tres suficientes años de transición para que en 2018, debutará con porras y fanfarrías el Instituto Nacional Electoral. Siendo digno heredero del IFE y no un mero hijo bastardo que cometió parricidio. 

Pero estos diputados tienen prisa por saciar sus ánimos de venganza, sin importarles que se están llevando entre las patas a la Institución que más les dio y ayudó a crecer desde 1990. Sin importarles que están sembrando la semilla de un conflicto en 2015 y hasta en 2018. Sin importarles que creen que cambiando la redacción del artículo 21 van a transformar una maquinaría compleja y extensa que lleva 23 años operando.

Lo poco o mucho que piensen ganar los partidos en las elecciones de 2015 no es nada, con el incomparable problema en que se puede meter la democracia mexicana de continuar con ésta apresurada y mal planeada reforma.

No podemos perder el trabajo que tanto trabajo costó conseguir en 23 años. Hay que ayudar al IFE a transformarse y crecer, no demolerlo a causa de prisas, inexperiencia, ambiguedad, revanchismo y desconocimiento.

Y en la próxima madeja: Subir el umbral de votación para mantener el registro de partidos, ¿sirve o no?.