lunes, 23 de septiembre de 2013

Miguel Ángel Mancera, 1° Informe

La Madeja del Gato (rendidora de cuentas)
Madeja #233
Por Christopher Vergara

El pasado 17 de septiembre, tal como lo obliga el Estatuto de Gobierno del Distrito Federal, el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera presentó su Primer Informe de Gobierno a 9 meses de iniciada la administración para la cual fue electo el pasado primero de julio de 2012. 

Los primeros nueve meses no han sido nada sencillo para Mancera, se ha enfrentado a una muy ríspida curva de aprendizaje político derivada de su falta de experiencia en esa materia, lo cual ha provocado que buena parte de su capital político se haya erosionado, o al menos haya generado cierta desilusión en la ciudadanía. 

Buena parte de los problemas de Mancera derivan de una terrible inexperiencia e ineptitud en su comunicación política. No sólo porqué se han dejado de cubrir espacios informativos (lo cual genera una sensación de ausencia de mando) sino que además han permitido una sobreexposición y maximización de determinados conflictos de seguridad que pese todo lo escandaloso y ruidoso que puedan ser siguen constituyendo casos aislados y no parte de la generalidad. 

Otro problema ha sido además la falta de liderazgo e innovación en el gobierno. Por una parte es entendible que es difícil (provenimos de 15 años donde se ha hecho lo inimaginable y más), pero ciertamente eso no es excusa para no presentar mayor inventiva en la acción de gobierno, una audacia que simplemente por ahora parece no existir. 

Los primeros nueve meses de Miguel Ángel Mancera al frente de la Ciudad en términos generales han sido buenos. Ha habido una correcta administración de la Ciudad. Los programas sociales operan con tranquilidad y normalidad, los servicios de salud pública a cargo de la Ciudad siguen creciendo y operando (incluso finalmente aplicando las recientes reformas a la Ley de Protección Animal), las finanzas de la capital siguen sanas con buenos índices de recaudación y con una deuda manejable. 

Las obras públicas continúan su planeación y desarrollo (ahí esta la línea 5 del Metrobús, así como el proyecto de extensión de la Línea 12), en términos generales la seguridad pública se ha mantenido en sus mismos niveles (buenos o malos según se le vea) de siempre, incluso tenemos una política activa que busca la ansiada reforma política aprovechando la coyuntura política favorable.

Entonces, ¿cuál es el problema para que a estos nueve meses tengamos una administración tan crítica y gris?. Son varios, el primero sin duda es que todo lo que mencioné anteriormente sólo ha sido eso: administrar. No hay audacia política. Miguel Ángel Mancera tiene el problema de que su perfil es netamente académico. Lo cual se resiente cuando venimos de tres administraciones ejercidas por monstruos políticos, incluyendo una figura crucial en la construcción del México democrático (Cuauhtémoc Cárdenas), el que debe ser el político más carismático de los últimos cincuenta años (Andrés Manuel López Obrador) así uno de los administradores y políticos más inteligentes que ha habido (Marcelo Ebrard). 

Y entonces llega Miguel Mancera que si, tiene un trabajo académico muy destacado y solido, que si, ha demostrado ser un funcionario eficaz que rinde resultados cuando se le permite trabajar ampliamente y que si, proviene de un ambiente apartidista y ciudadano, pero no es un político, ergo no está acostumbrado a las presiones, y a la inteligencia política que requiere de tacto en el ejercicio del poder. (Lo cual nos podría dar para hacer bonitas reflexiones sobre la conveniencia de los cacareados discursos de las candidaturas ciudadanas y demás pirotecnia política). 

Por otro lado también esta el asunto de la percepción sobre la seguridad. El problema en este tema es que esta construido en buena parte a percepciones (más que en cifras), lo cual lleva a ser un tema que permite mucha manipulación o desinformación. Es decir, nadie dice que los casos de Bar Heaven, o cualquier otro de los casos de alto impacto que se tienen en la Ciudad sean minimizables, sin embargo también es de resaltar que en términos netos son el mismo número (hasta de casos de alto impacto) que se vienen registrando desde hace unos cuatro años. Lo que ha cambiado es que no hay mensajes que llenen esos espacios. 

Otro problema en ese sentido ha sido la inexperiencia política y comunicativa de quienes están a cargo de las áreas de seguridad. Jesús Rodríguez Almeida y Rodolfo Ríos Garza en términos generales son capaces (o son igual de ineptos que cualquier Procurador o Secretario de Seguridad federal o del país), pero tienen mucha inexperiencia en como llevar los casos de alto impacto, lo cual ha generado problemas de percepción sobre una aparenta ola de inseguridad. 

Otro dato a resaltar también fue la fuerte sacudida en la SSP derivado de la salida de Manuel Mondragón y Kalb quién se llevó a más de la mitad de las piezas clave en la Secretaría hacia la Comisión Nacional de Seguridad lo cual generó reacomodos y curvas de aprendizaje forzosas dentro de la dependencia, y sin duda alguna también genero efectos indeseables en el trato a la criminalidad. 

Es por ello que a nueve meses de iniciado su sexenio Mancera ha pagado por un lado la cuota de novatez (bastante alta) así como el enfrentarse a una ciudadanía cada vez más exigente y que espera no sólo un eficaz administrador, sino un Jefe de Gobierno audaz e intrépido como los que ha tenido en los últimos quince años. 

Con todo ello, Miguel Ángel Mancera sigue teniendo mi voto de confianza. Creo que es muy temprano aun para exigirle resultados siquiera parciales (aun y que la ciudadanía sea un hato de desesperados). Que su curva de aprendiza esta por terminar y que las acciones en los próximos dos años van a ser relevantes y sobresalientes. Al tiempo. 

El Último Hilo: Lo único que sigo sin entender es como Mancera aprueba tan espantosa campaña de comunicación política del Primer Informe. Más allá de que sigue reciclando la imagen institucional utilizada durante su campaña (mismas tipografías, colores, acomodos visuales, etc). Están los esperpénticos spots de cámara borracha, animaciones cutres y un Mancera mal maquillados (aunque ya sin el jingle aquel que decía su nombre). No es negativo que Mancera quiera mantener ese estilo es imagen, pero siquiera que contrate a quien lo haga bien. 

Y en la próxima madeja: Review, aprovechando el lanzamiento en BD y DVD de Iron Man 3. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario