Madeja #191
Por Christopher Vergara
Para quienes somos fans de corazón de Disney, cada proyecto que entrega Walt Disney Animation Studios (el estudio madre por así llamarlo, con el cual inicia todo) es un evento que incluye mucha expectativa y un alto nivel de exigencia, en virtud del legado mismo que carga la compañía. Es además una larga travesía pues cada proyecto en Disney puede tomar la mar de años en madurar y pasar por distintas etapas y concepciones, el filme que nos ocupa hoy se tardó casi diez años en ver la luz. Así de enserio se toman las cosas estos muchachos.
Walt Disney Animation Studios ha venido realizando una profunda labor de modernización y transformación así como de mayor espíritu artístico desde la llegada de John Lasseter en 2006 que significó el fin de un régimen que sumió al estudio en un bache creativo que parecía interminable. Cada filme desde 2007 ha presentado una notoria mejoría respecto al anterior. Ralph, El Demoledor filme que nos ocupa en esta ocasión es clara muestra de ella.
Bajo la dirección de Rich Moore, Ralph, El Demoledor nos cuenta la historia de Ralph, un villano de un videojuego de arcade de los 80's que tras treinta años de venir realizando la misma labor sin que nadie lo apoye, reconozca o ayude, se halla harto y cansado de esa aburrida vida donde sólo ve como el héroe del juego, Félix, el reparador se lleva toda la gloria.
Decidido a cambiar eso, Ralph decide salir de su videojuego y buscar en otros la manera de obtener una medalla, así llega a un videojuego de acción (un clásico shooter de primera persona) llamado Hero's Duty donde conoce a la Sargento Colhoun para posteriormente llegar a Sugar Rush, un juego de carreras a la Mario Kart construido de dulces y caramelo donde conoce a Vanellope Van Schweetz con quien vivirá grandes aventuras.
Ralph, El Demoledor era particularmente esperada por mi por que el mensaje que tiene es el que a mi parecer es uno de los más Disney que hay: acepta y valora quien eres, amate a ti mismo, lucha por ser quien tu quieres. El mensaje es muy poderoso, pero lo importante aquí es la ejecución, y vaya que lo logra de manera especial.
La animación es alucinante, Mike Gabriel, diseñador en jefe de la película logra un trabajo fantástico con el filme los tres mundos que crea son maravillosos, desde uno muy sencillo y clásico para Fix-It Felix Jr. (el hogar de Ralph y Felix) hasta dos completamente diferentes, el muy oscuro, sombrío y perturbador Hero's Duty hasta el ultra colorido, cremoso y brillante Sugar Rush, sin olvidar la central de videojuegos que funge como la puerta de acceso a todos los juegos. El diseño de producción es brillante, creativo y colorido de principio a fin.
Los personajes y sus voces no se pueden quedar atrás, Ralph y Felix son un encantador y simpático par, Ralphe es tosco, fuerte y en apariencia malvado y Felix es tierno, gracioso y muy lindo. La Sargento Colhuoun es atractiva, imponente y de una fortaleza de temer. Vanellope es una niña graciosa, simpática y muy linda. Cuatro personajes completamente distintos, y sumamente encantadores.
Las voces en español no podían quedar en mejores manos, Mario Filio realiza un Ralph encantador y que transmite el cansancio y deseos de superarse que el personaje requiere, María Antonieta de las Nieves (en un icónico y magnífico regreso al doblaje) borda una fenomenal y dulcisíma Vanellope, Moisés Iván Mora se luce con su Felix y Rebeca Patiño le da en el clavo a un personaje tan diferente como la Sargento. La dirección de Mario Castañeda (y Raúl Aldana en el caso de Maria Antonieta) es acertada y bien realizada.
Aquí aprovecho para señalar que es muy inspirador ver el cariño y agradecimiento con el que María Antonieta de las Nieves se refiere a su regreso en el doblaje y en especial el orgullo que le produce que se trate de una película de Disney, creo que realmente son pocos los actores que se dan cuenta de lo grande que eso representa. Finalmente, la versión en inglés no podía tener más brillante elenco, John C. Reilly como Ralph, Jack McBrayer como Felix, Jane Lynch como la Sargento y Sarah Silverman como Vanellope son un elenco de primera.
Un elemento que le da mucha realismo al filme es sin duda la serie de cameos de grandes personajes de los videojuegos que hacen por aquí su aparición, desde los villanos de Mario Bros y Pac-Man hasta grandes héroes como Sonic o los personajes de Street Fighter.
El soundtrack es una de las cosas más brillantes que tiene el filme, haciendo honor al género de videojuegos, el filme esta cargado de canciones llenas de energía, instrumentos, música y color. el score realizado por Henry Jackman no queda a deber pero los temas cantados son geniales, desde el japonés Sugar Rush interpretado por AKB48, hasta Wreck-It, Wreck-It Ralph de Buckner & García pasando por mi favorito, When Can I See You Again? de Owl City, un tema sensacional para cerrar los créditos (aprovechando, vean los créditos son la cosa más fenomenal que hay en la vida, divertido y a 8 bits a tope).
Pero sin duda la gran fortaleza del filme radica sin duda en su magnífico guión, el filme tiene un ritmo impresionante y es divertido, energético, variado, lleno de un humor gracioso y transparente, con un desarrollo, un nudo y un final encantador (el giro de tuerca con el villano me sorprendió y agradó bastante).
Y como dije líneas arriba, el mensaje, Disney representa muchisímas cosas, pero una de las más grandes, una de las más universales y magníficas es el mensaje de autoestima, de valoración y de apreciación por lo que eres, sin importar lo que los demás digan u opinen de ti. Al final del día, Ralph aprende a aceptar quien es, aceptar cuál es su deber, cuál es su labor, cuál es su destino en la existencia y a ser feliz con ello, cambiando las pequeñas osas que le molestan (como el mal trato de los otros personajes del videojuego), pero aceptando y realizando su labor con la mayor entrega y pasión.
Al final Ralph se da cuenta que no necesita que los demás le digan que es un héroe o un villano, pues el, en su interior se ha dado cuenta que es una buena persona y en consecuencia que es un héroe, y que como tal, no requiere el reconocimiento de los demás para serlo. El se sabe héroe, y proyecta eso hacia los demás.
El Último Hilo: El filme es precedido de Paperman, Aviones de Papel, un corto animado dirigido por John Kahrs que muestra una técnica preciosa donde combina los elementos más efectivos y poderosos del CGI y la animación realizada a mano. Pero una vez más, su principal fortaleza radica en una de las anécdotas más emotivas y preciosas que se ha visto en la animación. Nominación segura al Oscar.
Y en la próxima madeja: Las elecciones en Estados Unidos.
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